viernes, 24 de julio de 2009

Los instantes decisivos de MIGUEL RUBIERA

MIGUEL RUBIERA: mrj@ain.cu


Miguel Rubiera nunca se separa de su cámara. Él sabe lo que hace. //DOBLE CLIC PARA DESPLEGAR LAS IMÁGENES//

Foto reportero de la Agencia de Información Nacional (AIN) en Santiago de Cuba, tiene el difícil don de captar el instante decisivo.


Rubiera vive ese segundo del disparo y la búsqueda del ángulo exacto. Su ojo de artista nos entrega la ciudad folclórica y cotidiana, el movimiento, la luz. Lo mismo, una mirada colectiva que un close up individual.



LA ISLA y LA ESPINA se privilegia al recibirlo en sus páginas electrónicas, con sus imágenes sobre el Festival del Caribe, evento que cada Julio reúne en Santiago de Cuba, el arte tradicional y popular de la región.


Sus imágenes se han publicado en varios medios de prensa del país.



La corneta china, símbolo del carnaval santiaguero.


El tambor

Esta imagen fue tomada para la cubierta de la última revista DEL CARIBE. / TODAS las imágenes de MIGUEL RUBIERA /

sábado, 4 de julio de 2009

SOS: Carta urgente desde HONDURAS


(Hemos recibido esta carta en nuestra bandeja de correo, desde HONDURAS)

S.O.S

Amigos, no habia podido comunicarme con ustedes por el aislamiento que he sufrido:

Despues del golpe de estado del 28 de junio a las 4:00am y que nos enteramos a las 6:00 am poque teniamos una actividad con la esposa del presidente a esa hora y en ese preciso momento ella recibio la llamada.

A partir de ese momento ha iniciado para nosotros una actividad que no tengo la minima idea cual sera el final. Junto a mis amigos Jeremias Lopez y Marlon Escoto formamos de inmediato un comite de resistencia que ha tenido mucho exito y mientras el ejercito invadia nuestra ciudad montamos una enorme protesta en la plaza central, actualmente nos hemos acantonado con mis amigos y una gran cantidad de personas que tambien han reacionado indignados por la traicion que hemos sido objeto por los golpistas el la entrada al departamento de Olancho justamente en Limones, hemos tenido que detener el trafico y hoy es el 4to. dia, mientras en las ciudades no se encuentra nada como leche, verduras, combustible e incluso los bancos ya no tienen recursos porque los transportes que movilizan el dinero no llegan. El caos es tal que la gente esta concentrada en sus casas y desde las ventanas asoma a veropicicopic

El lunes nos movilizabamos en 25 busus hacia la capital y el ejercito disparo contra 8 de los buses, perforandoles las llantas los cuales al momento que fuimos a comprarlas fueron decomisadas. Los medios de comunicacion en su mayoria son propiedad de los golpistas y nos dan informacion que conviene a ellos y si algun medio pretende dar la informacion como es, de inmediato lo cancelan.


Llevamos 4 dias luchando de manera pasifica y nos informan que los demas medios internacionales los han bloqueado de manera que no tenemos ninguna informacion pero el el gobierno de facto dice que todo en Honduras esta normal.

Los actos terroristas que estan practicado son inimaginables, nos tienen sin energia electrica y no podemos movilizarnos pues punchan las llantas de los vehiculos y han impuesto TOQUES DE QUEDA desde las 6PM a las 6Am.

Yo he recibido muchas llamadas telefonicas por altos comandantes entre ellos dos coroneles del ejercito que hacia tres dias compartia con ellos en mi casa y me habian demostrado su amistad, hoy me han librado una batalla pidiendo que renuncie a mi postura asegurandome que no me traicionaran y que en vez de estar segun ellos perdiendo mi tiempo deberia estar en el trabajo, pero no he aceptado pues mi postura es y sera siempre la misma que PREFIERO MORIR DE PIE EN LA LUCHA, ANTES QUE SERVIR A LOS GOLPISTAS. De mi trabajo come mi familia pero he puesto mi renuncia porque no estoy dispuesto a traicionar a mi pueblo.

Actualmente nuestras garantias constitucionales estan suspendidas y mi familia esta oculta y mis hijos no pueden salir para ir a la escuela, me han intervenido mi telefono y hacen llegar a mis hermanos y mis padres mensajes feos.
Ellos estan haciendo cualquier accion que pueda reprimir al pueblo, los alcaldes estan huyendo, no se encuentra ningun funcionario en la ciudad. No me puedo movilizar a solas porque me persiguen pero tenemos la esperanza que con el respaldo de los organismos internacionales y la presion de todo un pueblo que se ha tirado a las calles esto va a tener un final resuelto de acuerdo con nuestra lucha, de no lograr este objetivo tendre que abandonar mi pais con mi familia por persecusion politica de la que estoy siendo objeto.

El objetivo de escribir todo esto es para que nos ayuden a divulgar este tipo de informacion en los medios de su pais ya que pretenden silenciar las violaciones que estan sucediendo. Ya el Hospital mas grande que tiene Honduras se ha declarado impotente para atender a los heridos por el ejercito y la policia. La censura esta siendo su fuerte.


Espero poder tener otro contacto ya que este fue muy dificil, pronto le enviare algunas imagenes

Jorge A. Yanes Catacamas,
Olancho, Honduras, C.A.Cel. 504-9980

(Se ha respetado la ortografía, los modismos y estilo del documento original)

El arquetipo del "oriental" en la TV cubana



(Un resumen de este artículo, publicado en el semanario La calle del medio., N.7. noviembre de 2008, ganó MENCIÓN en el Concurso Nacional de Periodismo 26 de julio, 2009 de la Unión de Periodistas de Cuba, UPEC)

Reinaldo Cedeño Pineda
escribanode@gmail.com


La invisibilidad es una de las más terribles formas de la discriminación. Duerme agazapada en el desconocimiento, bebe de su propio veneno y legitima sus códigos, convirtiendo la exclusión en la norma.

Vivimos no sólo en el siglo de la comunicación, sino sobre todo, en el de la visualidad.

Por doquier, la imagen −y todas sus variantes− asalta con su enorme poder; la imagen y el movimiento, en una simbiosis sin la cual ya no sería posible imaginar la contemporaneidad.

El cinematógrafo de los Lumiere ha sido más importante para la humanidad que el ascenso a la luna. Es más, esa hazaña, sólo pudo ser aquilatada gracias al lente que la acercó a los hogares del mundo. Los avances posteriores en tal sentido (la televisión, la transmisión vía satélite, las imágenes vía Internet) no han hecho más que reafirmarlo.

La conformación −cotidiana y acumulativa− de nuestro sustrato cultural, corresponde más de lo que se suele aceptar a la pantalla doméstica, a la realidad que esta recorta. En tal sentido, las estadísticas alrededor de cuántas horas y cuáles son las vías de aprehensión del mundo circundante, pueden revelarse escandalosas.

El lente cumple sus propias leyes. Entre las consecuencias más inmediatas de la visualidad, se hallan el efecto de prestigio, la legitimación de autoridad y la fijación de valores, cánones y referentes; todo a escalas insospechadas, imposibles de lograr por otra vía.

Por supuesto, nuestro país no anda −no puede andar− ajeno a tales asertos; pero entre las jerarquías culturales y los valores que se desearía apuntalar, y los que en ocasiones van ocupando la pantalla, se han extraviado ciertos caminos. La Cuba del último medio siglo nunca ha rebajado su televisión a la condición de simple vehículo de enajenación; pero en la crítica radical ―entendida como ese ir a las raíces martiano― radica uno de los factores para su salud.

La Imagen Cuba y la televisión “nacional”

Para entrar en materia, no obstante, es necesario esbozar todavía uno de los conceptos más difíciles de asir: el de identidad nacional.

El “ser nacional” es la asunción de un concepto sicológico de representación, más allá de posiciones geográficas y kilómetros cuadrados. Esa representación asumida ha de convertirse en carne y savia de todas sus partes de manera irrenunciable, como la raíz sostiene al árbol y el tronco “representa” a sus propias ramas.

Lo “nacional” no es un atributo que se ha tomado a manera de garantía o de gracia divina; sino una expresión de carácter inclusivo, sin cuya manifestación se diluye, pierde la razón de su existencia y pasa a convertirse en una caricatura de sí misma.

Todo concepto es una síntesis, una generalización que antes ha hecho el análisis de sus partes para descubrir sus vasos comunicantes. Acudo entonces, a una de las definiciones más completas sobre identidad nacional, la del investigador Fernando Martínez Heredia, Premio Nacional de Ciencias Sociales 2006:

La identidad nacional es hija de una lenta y prolongadísima acumulación de rasgos, tomados, creados, reelaborados o recreados, de la vida cotidiana, los materiales míticos, las creencias, las expresiones artísticas y los conocimientos adquiridos de numerosas etnias, de sus choques, relaciones y fundiciones, de comunidades locales y regiones que compusieron el país. (1)

Así, la conversión de “lo nacional” en “lo habanero”, con el desconocimiento de las “relaciones y funciones”, con la negación de las “comunidades locales y regiones” (a las cuales debería presuponer y de las cuales debería nutrirse) es una clara corrupción del concepto.

El hogar, el barrio, el municipio, la provincia, la región… son los primeros espacios vitales que se advierten y que comienzan a formar parte del patrimonio personal y afectivo del ser humano.

El concepto de país es difícil de asir en las primeras edades, y el “terruño” es el lugar desde el cual ―en un proceso de educación, influencias, asimilación y sedimento― comenzamos a ser cubanos.

No habrá que confundir región con regionalismo: chovinismo desbordado, vicio descalificatorio del que advirtió Martí desde finales del siglo diecinueve: “Cree el aldeano vanidoso que el mundo entero es su aldea”. (2)

El regionalismo fue un pesado fardo que marcó la guerra de independencia contra España y exacerbarlo de cualquier forma ―la ausencia, el menosprecio, la deformación, la preeminencia― se presenta como una irresponsabilidad temeraria.

Los medios de prensa suelen acudir a códigos preestablecidos: fórmulas lingüísticas y enunciados que resumen un acontecimiento. Tal es el caso, por ejemplo, de las concentraciones o desfiles que sólo tienen lugar en la capital: se anuncia que “un millón de habaneros en representación de toda Cuba, acudirán hoy a…” Similares pautas son manejadas por la prensa foránea, al referirse a “declaraciones de La Habana” en lugar de “declaraciones del gobierno de la República de Cuba”. Es la clásica sinécdoque, tropo de la lengua en que se toma la parte por el todo.

Sin embargo, ninguna metáfora ni recurso de la lengua basta para legitimar el abuso de la “visualidad Habana” como “visualidad Cuba”, es decir La Habana vista no como la cabeza del país, sino como “el país”. En la práctica se ha convertido en una suplantación. Así, queda secuestrada la multiplicidad de la nación, se castran los referentes visuales de una parte y con él, sus protagonistas, modos, costumbres y escenarios.

El problema sería de menor cuantía si esto se reservase al ámbito teórico; mas su expresión práctica ―a manera de un cáncer―, va tomando cuerpo y empieza a dejar amargas consecuencias en los más diversos ámbitos; sobre todo en uno impensable: la discriminación.

Me resisto a no contar la anécdota: Después de muchos años, volví a ver en La Habana a mi ex compañero de estudios, Ayman, y decidí que no había mejor manera de celebrarlo que ir al estadio Latinoamericano a ver un clásico de la pelota cubana: Industriales−Santiago de Cuba. Y allá nos fuimos.

Todo iba bien… hasta que empezaron los gritos de “palestino, palestino” dirigidos a los aficionados orientales y a los jugadores visitantes. Ayman nació en Palestina y ha recorrido medio mundo en contra de su voluntad. Es muy sensible al tema.

Ser palestino para él es un orgullo irrenunciable, y por más que le expliqué la reasignación de significados, la migración interna y las pasiones que desata el deporte… tuvimos que irnos antes de finalizar el noveno inning. No entendió que un término que le resulta sagrado fuera usado con matiz despectivo… y mucho me costó que pasara la página.

En una dinámica asociativa relacionada con las dificultades de vivienda y asentamiento, el oriental emigrado hacia la capital, devino en “palestino”. Siguiendo la derivación, todo “oriental” en La Habana es considerado “un palestino” o “un posible palestino”, y de allí emergen ―casi por rutina―, las imágenes y los pareceres.

El arquetipo per se del “oriental” construido por la televisión cubana es ese “emigrado oriental”. El esquema suele ir acompañado de toques marginales y de comentarios desdeñosos o satíricos sobre su origen, cual si se tratase de una minusvalía, o de un error a subsanar. Más de uno se presta a estos reduccionismos.

De un plumazo, las series cubanas han desaparecido a “los orientales otros” que viven, trabajan, padecen, aman y mueren en el Este de la Isla; o a los orientales profesionales que viven en La Habana.

El lente nacional ha de darse prisa por calibrar esas miradas y abrirse asimismo a otras ópticas como las exhibidas en los Encuentros de Jóvenes Realizadores ―Buscándote Havana de Alina Rodríguez Abreu, es apenas uno de ellos― que aún esperan por su difusión en la pantalla doméstica.

En el tema de la migración de Oriente a Occidente (y la migración interna en general) subsisten en nuestros medios de difusión masiva, espacios ausentes, mucho folclor y poco análisis.

Otro vocablo para designar la geografía no capitalina (“el interior”) revela una cuota discriminatoria por el estilo, además de portar al mismo tiempo, trampas geográficas y anacronismos. Aunque su uso aparece ya en el decimonónico Diccionario provincial casi razonado de vozes y frases cubanas de Esteban Pichardo, no hay que olvidar que la herencia llega de una época de Habana intramuros/ extramuros, de los difíciles y lentos viajes “tierra adentro” a caballo… de los que nos separan largamente más de una centuria.

Laa condición de La Habana como hermosa ciudad de puerto y mares, es compartida por varias de las urbanizaciones de la Isla, y ninguna provincia cubana está ausente del contacto con el Caribe. Luego, esa dicotomía interior/exterior (el “exterior” que se supondría como lógica antinomia del “interior”) no tiene en Cuba razones que la asistan ni reales asideros.

Aunque figuraciones por el estilo no son privativas de nuestro país ―pues las capitales de las naciones del Tercer Mundo suelen ser las “vitrinas de la nación” y reservan para sí una centralización de poderes de la cual emanan instituciones y opciones únicas― valdría la pena estudiar el fenómeno más allá de lo anecdótico, el “palestinaje” y los “interiores”.

¿Cuándo comenzó el proceso de “habanización” o “habano-centrismo” de la cultura cubana? ¿Qué consecuencias sicológicas, migratorias, culturales y sociales ha tenido? ¿Cuánto ha contribuido a reforzarlo nuestra televisión en los últimos años?

El 7. Congreso de la UNEAC (Unión de Escritores y Artistas de Cuba) dejó sentada las preocupaciones de sus miembros por "las crecientes manifestaciones despectivas hacia las personas de la región oriental del país"(3)
Es el reconocimiento tácito a la existencia de un problema, un primer paso que presupone un segundo: la búsqueda de soluciones.

El país “otro”

Si bien, de ninguna manera se le podrá endilgar a la televisión cubana ser la causante de un fenómeno que lleva en sí varios entramados; su reflejo acrítico y la recurrencia facilista a los arquetipos, lo ha redimensionado. De forma contraproducente, existe una marcada reticencia a admitir el fenómeno, o al menos a admitirlo en su dimensión real: es la discriminación invisible.

El aplastante peso de la visualidad habanera acaba convirtiendo en raros los modos de actuar o de ser no capitalinos. De esta manera, ante la falta de costumbre visual, “lo diferente” comienza a ser, poco a poco, “lo inferior”.

Lo más lacerante de todo es la omisión, que hurta del reconocimiento de la nación a quien echa su vida en su pedazo de patria, y no permite jerarquizar vidas y obras que potencialmente serían espejo para toda la nación. En consecuencia, aparece su contraparte: se abre paso a propuestas de menor relevancia, cuya difusión responde más a la cercanía geográfica que al nivel cualitativo. Ejemplos sobran.

La invisibilidad crea un círculo del infierno: no estás en la televisión porque no te conozco; como no te conozco, no estás en la televisión. No es posible querer lo que no se conoce. La invisibilidad es un crimen al alma misma de la nación.

Las estrategia sostenidas hasta hoy para paliar estas ausencias son, a mi modo de ver, muy limitadas, fragmentarias e inconsecuentes: la llegada a una provincia, de festival en festival, de algunos programas de la “televisión nacional” con sus equipos técnicos y artísticos; ese modo de actuación, esos “tres minutos de fama” otorgados a los “artistas de provincia” por la mirada descubridora llegada desde la capital, no puede ser la vía.

La programación informativa, especialmente el Noticiero Nacional de Televisión, se “alimenta” de reportes periodísticos que llegan desde muchos lugares del país. Es cierto. Lamentablemente ese esfuerzo, no pocas veces, queda rebajado por el olvido de la dramaturgia informativa. Esta es sustituida por el camino trillado, el ángulo decantado, la poca humanización de la noticia.

El espectáculo noticioso queda disminuido de tal forma que ninguna estructuración interna del noticiario puede salvarlo (a pesar del diseño artístico que la experiencia de avezados como Roberto Ferguson suelen proponer). En ocasiones, cuando se trata de celebraciones o conmemoraciones a lo largo del país, los reportes para la emisión estelar padecen de una lamentable falta de personalidad e imaginación: la visualidad se tiñe del mismo color.

Sin embargo ―y pese a esos señalamientos― vale apuntar que la programación informativa ha sido capaz de escudriñar en los rincones del país y enriquecer nuestro conocimiento del archipiélago; mientras en otras áreas existe un verdadero desconcierto.

Ahí están algunos programas variados o culturales: no se aprovechan los mecanismos creados de tributación informativa (los despachos de la Agencia de Información Nacional, las direcciones provinciales de cultura y sus departamentos de divulgación, por ejemplo). ¿No se levanta un teléfono, no se crean lazos propios?

Y allá va más de lo sabido: el conductor lee su “nota cultural” que se refiere en exclusiva a la actividad de tal anfiteatro, de tal casa de cultura de La Habana…

Si bien en la capital viven uno de cada cinco cubanos, las otras cuatro quintas partes de los televidentes no podrán disfrutar de estas propuestas por obvias razones.

La subvaloración del destinatario y la falta de una conciencia verdaderamente nacional son dos de los errores más comunes de algunos programas de la televisión cubana que se emiten desde la capital. Reconstruir esa conciencia es uno de sus grandes retos.

Los dramatizados, son punto y aparte.

Los cubanos podremos disfrutar las series foráneas, pero no hay que confundirse: nos gustan las nuestras, con nuestros artistas, nuestros directores y nuestros escenarios. Somos exigentes, porque así nos lo han enseñado, mas no me referiré al océano de las repeticiones ―ni a como se defrauda a la audiencia en espacios como la telenovela o las aventuras―; sino a ciertas ofertas que se han detenido en el tiempo.

Me he preguntado si, acaso, algunos escritores y directores no han sobrepasado aquello de “los personajes típicos” y “las circunstancias típicas”― cuando todo no es más que una entelequia, una fabricación intelectual―.

¿Y los asesores? Creo sinceramente que la asesoría es la gran asignatura pendiente en la radio y la televisión cubanas.

Se actúa como si la mirada habanera desde sitios capitalinos examinara “la otredad” del país desde cierta altura, recortara los personajes a su parecer y acabara convirtiendo los espacios en una pasarela de parodias: el oriental, el pinareño, el guajiro, el negro…

Miremos las últimas propuestas: el oriental que “no se vuelve atrás por nada del mundo”, la vieja tía que llega “desde lejos”, el bombero decimista hazmerreír del colectivo; la guajira paridora y refranera, la joven oportunista y ladrona, o el pueblo imaginado monte adentro donde la gente se mueve entre la torpeza y la payasada…

Podría decirse que al fin y al cabo, la guajira Lucrecia y su familia (telenovela Oh, La Habana) y la joven también campesina (Mónica de Polvo en el viento), no son todo Oriente: es verdad.

La circunstancia que les asigna ese carácter de representación de toda una región, es precisamente la ausencia de personas comunes no capitalinas en los seriados cubanos; y sobre todo, la recurrencia a los “guajiros tipos”/“orientales tipos”, ficciones que acaban creyéndose como realidades.

Si bien Oriente ha mantenido su identidad regional ―más allá de la división política administrativa de 1976― perdóneseme la perogrullada: orientales hay de todo tipo… pero los que “interesan” y los que “se ven” salen de un mismo molde.

En las series cubanas ―es curioso― la región central del país, no tiene personajes, casi “no existe”. Oriente es “la gran loma”: no hay orientales citadinos, los escogidos siempre son montañeses.

Se escribe sobre lugares de los que sólo se tiene una somera idea, y se representa a su gente con igual ligereza. El látigo humorístico se detiene en sus espaldas, casi con saña. Es increíble que aún se hagan guiños al guajiro de Romance del Palmar de Ramón Peón, que guardaba el dinero en la funda del machete.

Las series dramatizadas cubanas están urgidas de salir del escenario habanero, desandar otras calles, conversar con otros cubanos… para retomar el pulso de la nación.

Hacia una nueva visualidad

Al hablar de la “visualidad nacional”, algunos han tomado como ejemplo la Serie Nacional de Béisbol. Ahí está un ejemplo de política televisiva que cada año convierte en “nacionales” desde la pantalla a los “peloteros villaclareños” o a los “peloteros pineros, pinareños o santiagueros”. Las cámaras van a ellos… pero lo que debía ser regla es una excepción. Incluso allí ―hombres aparte― el déficit visual continúa: ¿dónde está la diferencia esencial entre un estadio y otro?

La cultura cubana es, por definición, una cultura de resistencia, de cimarronaje, una cultura tercermundista erguida frente a la hegemonía europeo-norteamericana. La Casa de Las Américas, el Festival del Nuevo Cine Latinoamericano, la presidencia del Movimiento de Países No Alineados… son muestra de esa vocación.

Por eso, se presenta como una inconsecuencia ese diálogo centro−periferia como relación entre la capital y las provincias en nuestros medios masivos.

Es hora de saltar relaciones verticales en demasía, racismos culturales y prejuicios sostenidos que han secuestrado la Imagen Cuba a parte de los cubanos.

La televisión está urgida igualmente de otras voces autorizadas que tributen al pensamiento nacional y cuyo ámbito, proyección y experiencia vital salgan del circuito habanero.

Lo mejor de todo es que, ese secuestro de la imagen cubana, hoy por hoy, no puede sostenerse en falta de capacidad profesional ni en dificultades técnicas insalvables, porque mucho se ha trabajado en la superación profesional, en la dotación de equipos para emisoras y telecentros, tanto provinciales como municipales.

Una sola muestra: Primada Visión (telecentro de Baracoa de reciente creación) fue quien llevó a Cuba y al mundo las impactantes imágenes de las penetraciones del mar en esa ciudad cuando el huracán Ike.

La propia transmisión de las tribunas abiertas reveló la existencia de un talento vasto en todo el país, la capacidad organizativa de los territorios y las posibilidades de colaboración técnico-artística entre estos y la capital.

Hace cuarenta años se fundó Tele Rebelde en Santiago de Cuba. Hablar con sus fundadores (capitalinos y santiagueros) es un viaje hermoso a la memoria, a la pasión… y también al dolor. Cuando en 1986 fue reconvertido en canal territorial (Tele Turquino), y no en el canal nacional que debió ser… se fracturó la posibilidad de establecer referentes visuales no habaneros de forma permanente para toda la Isla.

El cuadro dramático de Tele Rebelde ―formado con no poco sacrificio y entusiasmo― se diluyó, o emigró. Ni siquiera podremos imaginar cuanto se perdió. Aunque se ha seguido trabajando, la pregunta de las razones para aquella decisión, sigue en el aire, cual un fantasma errante.

Tele Rebelde desde Santiago de Cuba fue la gran oportunidad perdida de ampliar la visualidad cubana.

A mi modo de ver, urge explorar varios caminos hacia una nueva visualidad cubana, y también hacia una nueva sonoridad, no olvidarlo.

A la palabra “nacional” hay que recuperarle su significado.

Hoy por hoy, brillan en nuestra televisión algunas de las menciones y propaganda de bien público, por lo que sería conveniente servirse de ellas para abordar de manera creadora esas “crecientes manifestaciones despectivas hacia las personas de la región oriental”. Sería un gran servicio al país.

Un signo positivo ha sido la selección de programas de canales provinciales que se transmiten para todo el país, pero es necesario perfilar tal gestión, garantizar que las propuestas escogidas alcancen la calidad requerida, sin que dupliquen estéticas ni propósitos (como parece ocurrir en los programas juveniles). No es suficiente escoger: hay que estimular esas producciones, repensarlas para el destinatario nacional, y apoyarlas cuando sea menester, sin que eso signifique suplantar a los especialistas de cada región.

Hay que estudiar la posibilidad de reconvertir uno de los canales de alcance nacional ―o al menos algunas de sus horas― en el espacio que acoja el talento desarrollado en otras ciudades de Cuba, en su ámbito, con sus actores, técnicos y presentadores.

El personal técnico artístico de los telecentros está por lo general subutilizado, marginadas sus propuestas a las horas de paso y ávido de hacer. Esa idea toca a la puerta de los canales educativos, que no acaban de concretar su perfil y se han convertido en repetidores de espacios de otros canales o en transmisores de enlatados foráneos.

Estamos tan habituados a que grupos y solistas de jerarquía residentes en provincias, vayan al encuentro de las “cámaras nacionales” que no advertimos la cuota de inconsecuencia que portan estos viajes ―casi siempre esporádicos, breves y complejos― dada la carencial realidad cubana. Estamos viendo las cosas al revés.

Son las “cámaras nacionales” las que deben enfocar al artista en sus escenarios habituales, tal como se hace con la pelota, a lo largo de la nación. Espectáculos culturales no menos dignos que el béisbol, podrían recibir similar tratamiento, junto al de la grabación y la transmisión a posteriori para todo el país.

Tal vez, algunos no han valorado suficientemente los aportes de la Televisión Serrana. Sin miradas paternalistas, in situ, los documentales de esta propuesta experimental ―con un buen número de galardones― significaron una renovación del rostro y el paisaje cubano desde las comunidades serranas de la provincia Granma. Sin desconocer sus singularidades, es preciso revisitar la médula de esa experiencia y trazar desde allí estrategias actuales y más amplias, que exploren nuevos espacios.

El panorama musical cubano necesita también aire fresco en el orden visual, y para ello tendrá que salir del circuito de los mismos grupos, los mismos estudios y los mismos intérpretes.

Aunque en todos los sitios no haya iguales condiciones, existe más de un teatro, más de un estudio en el país que podría acoger a los artistas de su territorio (y su entorno más próximo), y desde allí proyectarlos nacionalmente, sin necesidad de tocar las puertas de 23 y M. La racionalidad de los recursos y la pluralidad de las opciones así lo aconsejan.

No creo que alguien ponga en duda que la televisión se ha convertido para una buena parte de los cubanos, en columna vertebral de su diversión: la más barata, asequible y permanente, y de ahí su exigente encargo social.

Es hora de abrir los goznes, hora de que el lente nacional redescubra a un país de cuatro letras, extendido de San Antonio a Maisí y que se llama CUBA.

NOTAS:

(1) Fernando Martínez Heredia: “El horno de los noventa”, en La Gaceta de Cuba, N.5, La Habana, septiembre-octubre, 1998, p.4.
(2) José Martí: “Nuestra América” en Obras Escogidas, T II, Editorial de Ciencias Sociales, La habana, 1992, p. 480. (Artículo publicado originalmente en La Revista Ilustrada de Nueva York, 1 de enero de 1891).
(3) Documentos de la Comisión Cultura y Sociedad, en el 7.Congreso de la UNEAC, efectuado del 1 al 4 de abril de 2008 en el Palacio de las Convenciones de La Habana.


---Ganadores del Concurso Nacional de Periodismo 26 de Julio 2009.


viernes, 3 de julio de 2009

NATACIÓN CUBANA: Hansel García, el rubio alto del corazón gigante



ACTUALIZACIÓN... En los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011, el cubano mejoró todas sus marcas y ganó plata en los 100 metros (48.34) y bronce en los 50 metros con 22.15. Y para SORPRESA de todos se metió en la final olímpica de Londres 2012 y quedó séptimo con nuevo registro de Cuba de 48.04 que repitió en la semifinal y en la final. 

El ex polista rompió en 100 libre la marca para el evento y la nacional que databa desde hace una década. Primer cubano en bajar los 50 segundos.

Por Lisset Ricardo / Foto: Daniel Anaya (JIT)

 
La Habana (3 jul).- EL EXPOLISTA Hansel García debutó como tritón fuera de su país con récord nacional y para los campeonatos centroamericanos de aficionados a la natación (CCCAN) al marcar 49,53 en los 100 metros libres en la cita con sede en Barquisimeto, estado venezolano de Lara.

De esta forma se convirtió en el primer cubano en bajar de los 50 segundos, pues el mejor registro – 50,24- estaba en poder del matancero Marcos Hernández desde el cuatro de agosto de 1999 en ocasión de los Juegos Panamericanos de Winnipeg.

La cota del evento era de 51,67 segundos, implantada por el panameño Ismael Ortiz desde la edición del 2005.

Ya dueño del primado en su inicio foráneo, Hansel desafió en la final a los favoritos de esta distancia, principalmente locales, que cuentan con buenos velocistas, y se adueñó del oro con tiempo de 50,12.

“Es el mejor regalo que puedo hacerle a mi entrenadora”, dijo en llamada telefónica el rubio alto de corazón gigante refiriéndose a Lulú Mojarrieta, jefa del colectivo técnico que prepara en La Habana a los cuatro cubanos que asistirán al Campeonato Mundial de Roma a finales de julio.

“Realmente estoy muy contento, pero cuando no logré bajarlo más en la final me dio deseos de llorar porque sé que pude hacerlo y ella espera mucho de mi”, manifestó el veinteañero de Villa Clara, quien por embullo compitió en abril en la Copa Marcelo Salado y dominó los 50 y 100 libre, actuación que amplió dos semanas después en los III Juegos del ALBA con tres oro y una plata.

Para hoy están señalados los 200 libres, tramo para el que Hansel aún no está bien preparado, pero cabe la posibilidad que se lance al agua, ya que mañana descansa y el domingo competirá en los 50, prueba en la que puede dar otra agradable sorpresa.

“Él mereció este resultado porque ha trabajado muy duro, y su inicio fuera del país realmente ha sido algo meritorio. Incluso pienso que si no hizo mejor tiempo en la final fue precisamente porque sentirse de pronto un recordista lo desconcentró, pero estoy muy feliz”, declaró su preparadora Lulú.

Fue ella una de las que inmediatamente confió en el jovencito desde que este se tiró con valentía a la pileta del complejo Baraguá en desafío a la técnica y la preparación de un nadador, lo que soñó ser Hansel, a quien en sus inicios los profesores convencieron de no tener casta para tal empeño.

Con la presea del “Pollo”, como le dicen al espigado tritón de la categoría más de 18 años, Cuba suma 14 medallas, incluidas otras dos de oro con las de Amanda Estupiñán en 200 mariposa y Jennifer Almaguer en los 100 libre, ambas en 13-14.

ARTÍCULO RELACIONADO:
---Natación cubana: La etrena sed y las brazadas de Fidel http://laespinadelolimpo.blogspot.com/2007/12/natacion-cubana-la-eterna-sed.html
---Beijing 2008: Natación cubana en el Cubo de Agua?
http://laespinadelolimpo.blogspot.com/2008/08/bejing-2008-natacin-cubana-en-el-cubo.html

jueves, 2 de julio de 2009

REVISTA CASERÓN: Este lunes 6 de julio, último número


Ensayo, crítica, narrativa y poesía conforman el último número de la revista Caserón de la UNEAC, a presentarse este lunes 6 a las 11.00 a.m. en la galería La Confronta de la calle Heredia, arteria cultural de Santiago de Cuba.

Caserón abre su último número con una crónica de la galardonada escritora puertorriqueña Tina Casanova sobre el arte de la escritura e incluye el artículo “El Colibrí de la epopeya”, adelanto de un volumen de Soledad Cruz sobre Celia Sánchez Manduley.

La revista despliega en sus páginas un estudio sobre la huella arquitectónico-cultural del teatro Vista Alegre (Raydel Naranjo), una mirada singular sobre Emilio Ballagas (Antonio Desquirón) y un artículo de fondo sobre el arquetipo del oriental en la televisión cubana, de la autoría de Reinaldo Cedeño.

Caserón conforma su dossier con la obra de la mítica poetisa Libertad Dearriba, desaparecida a los 16 años y en materia literaria incluye además las creaciones de Teresa Melo, Alberto Sicilia, José Orpí, Maikel González, Adrián Quintero, Eric Caraballoso y Miguel Barnet.

La revista de la UNEAC en Santiago de Cuba realiza un despliegue fotográfico dedicado al Salón Oriente de artes plásticas, al tiempo que reseña sucesos vinculados a la música, el teatro y la danza.

La presentación correrá a cargo del escritor Yunier Riquenes y se inscribe dentro del Encuentro Internacional Poetas del Caribe y el Mundo de la Fiesta del Fuego, que rinde homenaje en esta edición a la cultura de Honduras.

Encuentro de Poetas del Caribe y el Mundo “Jesús Cos Causse” (4-8 de julio)


(Jesús Cos Causse escribió: "La poesía es la lámpara del mundo")

♣ Festival del Caribe 2009. Santiago de Cuba. Dedicado a Honduras y la cultura garífuna

Viernes 3 de julio

5:00 pm. Desfile inaugural del Festival del Caribe
con todos los artistas invitados.
(Frente al Gobierno Municipal)

Sábado 4 de julio
10:00 am. Inauguración del Encuentro. Declaración y firma solidaria
con el pueblo de Honduras.
Intervención del poeta Edel Morales, director del Centro
Cultural Dulce María Loynaz y de Reynaldo García Blanco, poeta y
director del Centro de Promoción Literaria José Soler Puig..
Lectura de los poetas hondureños Rebeca Becerra, Roberto Sosa,
José González, Juana Pavón, Xiomara Cacho y Heber Sorto.
Presentación de los libros Antología de poesía hondureña,
y Poesía negra hondureña, preparada por Claudio Barrera.
Artistas invitados: Vocal Divas y Teatro de la Pasión.
(Salón de los Vitrales, Plaza de la Revolución)
3:30 pm. Palabra de poeta: Efraín Nadereau, Carmen Candiot,
Belkis Crespo, Antonio Desquirón.
(Librería Ateneo. Centro de Promoción
Literaria Soler Puig, Calle Enramadas)
4:30 pm. Palabra de poeta: Yunier Riquenes, José Orpí, Nadia Ocaña,
Armando Palma, María Antonia Castro, Jorge Matos.

Domingo 5 de julio

8:00 am. Poesía de viaje. Visita al municipio San Luis:
todos los escritores acreditados.

Lunes 6 de julio

10:00 am. Poetas en la historia: Manuel Justo Rubalcava
Diálogo con la Dra. Olga Portuondo Zúñiga,
Historiadora de la Ciudad de Santiago de Cuba.
(Galería La Confronta, UNEAC)
11:00 am. Presentación de la revista literaria Caserón,
de la UNEAC en Santiago, por Yunier Riquenes.
11:20 am. Palabra de poeta: Antonieta
Máximo (Honduras), Edel Morales, Marino Wilson Jay,
Reynaldo García Blanco, Oscar Cruz.
(Galería La Confronta, UNEAC)
3:00 pm. Palabra de poeta: Cornelio Hernández y José Polanco
(República Dominicana), Marcial Lorenzo Escudero, Demián Rabilero,
Frank Dimas, Reinier Rodríguez, Agustín Garzón.
(Librería Ateneo. Centro de Promoción
Literaria Soler Puig, Calle Enramadas)
4:00 pm. Peña literaria La Casa del Alibi.
Invitado: Edel Morales. Lectura de textos del libro
Escrituras visibles (Letras Cubanas).
Anfitrión Oscar Cruz (Librería Ateneo. Centro de Promoción
Literaria Soler Puig, Calle Enramadas)
6:00 pm. Encuentro con el artista de la plástica martiniqueño
Habdaphai. Presentación de Soy de un país que
se llama Mundo (poemas de Teresa Melo,
dibujos de Habdaphai).
(Alianza Francesa, calle 6, esq. 11, Vista Alegre)

Martes 7 de julio
10:00 am. Islas/la Isla. Encuentro con el poeta y ensayista Javier Cabrera
(Islas Canarias) (Centro Cultural Prat Puig)
11:00 am. Presentación especial de libros de la Asociación
Heredia, de México: Ecología y poesía: apuntes en torno al poema El Niágara
y Del verso nació la acción: José María Heredia, de Rafael Carralero.
(Centro Cultural Prat Puig)
2:00 pm. Pintar con palabras.
Sala de Oncología Hospital infantil: Javier Cabrera,
Sandra de la Cruz, Tania Leonor Portelles.
2:00 pm. Poesía y origami. Hogar de niños sin amparo filial.
Proyecto de la escritora Mirna Figueredo, con José Orpí
y María Elena Domínguez.
2:00 pm. Poetas en la Fábrica de Tabacos de La Alameda:
Gilberto Basilio (Curaçao), Reynaldo García Blanco, Edel Morales, Juan Carlos Veranes, María Antonia Castro, Nadia Ocaña, Belkis Crespo.
5:00 pm. Peña literaria Prosa Nostra.
Invitados: narradores hondureños Julio Escoto,
Armando Garicia, Eduardo Barht.
Anfitrión Yunier Riquenes
(Librería Ateneo. Centro de Promoción
Literaria Soler Puig, Calle Enramadas)

Miércoles 8 julio

10:00 am. Palabra de poeta: Erick Gil Salas (Costa Rica),
Reinaldo Cedeño, Rodolfo Tamayo, Leandro Báez,
Eduardo Montalbán, Erika Castellanos.
(Librería Ateneo. Centro de Promoción
Literaria Soler Puig, Calle Enramadas)
11:00 am. Multimedia La poesía de Gonçalves (Angola). Presentación
con el autor. (Librería Ateneo. Centro de Promoción
Literaria Soler Puig, Calle Enramadas)
3:00 pm. Revista Oral La Palma Escrita,
por Reynaldo García Blanco e invitados. Poesía rítmica,
con Gilberto Basilio (Curaçao). Dossier: La palabra en estreno:
Daniel Liens, Rainer Martínez, Alberto Jaime, Anabel Lorenzo, Javier Mora.
(Museo del Ron)
8:00 pm. Clausura y Declaración Final
del Encuentro de Poetas. Convocatoria al Encuentro 2010
y al Premio Internacional de Poesía Jesús Cos Causse.
(UNEAC, Calle Heredia)

miércoles, 1 de julio de 2009

POESÍA por HONDURAS. “Se ha levantado un triángulo de humo sobre la plaza”


Una declaración solidaria con Honduras y la presentación de antologías de poesía del país centroamericano, iniciará este sábado 4 de julio en Santiago de Cuba, el Encuentro de Poetas del Caribe y El Mundo “Jesús Cos Cause” en el marco del Festival del Caribe, en Santiago de Cuba.

El taller se extenderá hasta el 8 de julio próximo.

La poetisa Teresa Melo, organizadora del Encuentro, en exclusiva para LA ISLA y LA ESPINA, pone a nuestro alcance un adelanto de esos versos que llegan desde ese país centroamericano. Sirva también la poesía para combatir la barbarie y la bota militar sobre ese pueblo, víctima ahora mismo de una cruenta represión repudiada por el mundo.

Fragmentos de poesía hondureña

... no somos los frutos oscuros de esta tierra,
entre nosotros está el amor,
nada puede perdernos,
nada.
(Heber Sorto)

Nadie pregunta aquí por la poesía
pero seguimos arando sobre tierra y mar
hasta que reviente la estación donde
se pudran las cáscaras del odio.
(José Antonio Funes)

Rifles despuntando esperanzas,
palabras cuánticas midiendo injusticias.
Se ha levantado un triángulo de humo sobre la plaza
y perfora a cuadros el grito glacial de la multitud.
Una sustancia violenta ronda las esquinas,
hombres verduzcos con bombas tragapalabras
llenan alforjas de desesperación,
cuento común para empezar el día.
(Mayra Oyuela)

Estar vivo
y ser de este país
y de estas gentes
no es alegre ni triste
sino necesario.
Ser fiel a las raíces,
seguir creyendo
en la posibilidad de la esperanza;
es el único modo de sobrevivir
a la miseria de este tiempo.
(María Eugenia Ramos)

PINA BAUSCH: La danza revolucionaria y eterna



(Carolina Robino BBC Mundo)

Miedo, rabia, ternura, amor, sexo. Algunas de las imágenes más hermosas que se hayan creado sobre estos temas surgieron de la mente de Pina Bausch, la coreógrafa alemana cuya muerte difundieron este martes las agencias de prensa.

La artista -considerada la gran revolucionaria del teatro-danza contemporáneo- se fue a los 68 años, pero dejó tras de sí una estela de innovación.

Escenarios llenos de claveles, muros que se derrumbaban ante los ojos del espectador, bailarines en precario equilibrio unidos por el desafío de llevar manzanas sobre sus cabezas.

Fantasmas que bailan entre sillas; agua que se bebe, que moja, que seduce, que mata; desnudos cubiertos de globos, la absurda batalla entre hombres y mujeres. Todo lo que tocaba lo convertía en expresión visual. Y en extremos.

La primera vez que la vi en Londres, hace ya varios años, tuve la sensación de estar ante algo único. Era la reposición de "Kontakthof", una obra original de 1978, pero tenía una particularidad: para el remontaje había contratado a mayores de 65 años, jubilados de la ciudad de Wuppertaler -donde estaba la sede de su compañía- sin experiencia como bailarines.

Y mientras ellos bailaban y giraban y se expresaban, yo -que tenía 30 y tantos- quise por primera vez tener más de 65 para poder colarme en esa fiesta. Era tan hermoso que después de dos horas, me encontré deseando que el espectáculo nunca acabara.

Pina Bausch nació en Solingen, en el oeste de Alemania el 27 de julio de 1940. Fue discípula de Kurt Joss, estudió becada en Estados Unidos y cuando volvió a su país natal comenzó a dirigir la compañía que años más tarde la llevaría a la fama. En un comienzo pocos la entendían y muchos salían indignados de sus obras. Pero no duró.

En el mundo de la danza era una diosa. Fue ovacionada y ganó premios por trabajos como "Cafe Müller", "Palermo-Palermo", "Nerken y Masurka Fogo". Los teatros del mundo se peleaban por tenerla como invitada.

Era una incansable. Según difundió la Tanztheater Wuppertal estuvo trabajando hasta el último momento. Hace sólo dos semanas se había estrenado su último trabajo, una instrospección al pasado de Chile a través de un baile lento y una música melancólica.

La pieza, una co-producción de Pina Bausch con el Teatro Santiago a Mil y el Instituto Goethe, formaba parte de las celebraciones del bicentenario del país sudamericano, que se llevarán a cabo a partir de enero de 2010.

Murió de manera inesperada, luego de que hace cinco días se le diagnosticara un cáncer.

Para sus bailarines debe ser como la orfandad. Pina Bausch daba entrevistas raramente. Era tímida, obsesiva y perfeccionista. Trabajar con ella -dicen- era como entrar a una cofradía que se pagaba con pocas horas de sueño y muchas de sudor y se compensaba con el placer de ser parte de algo excepcional.

Para el público, esa intensidad no era otra cosa que un festín visual.
(Título original: Muere una "revolucionaria" de la danza)