sábado, 29 de diciembre de 2012
“JUGANDO CON MI PRIMO” / Reseña participante en el I Concurso Caridad Pineda In Memoriam
(El autor de la reseña,
Anniel Portales lee en la terraza de la Biblioteca Elvira
Cape durante la Peña
Letras Compartidas en su primer aniversario. A su lado, reflexiva, la poeta Teresa
Melo, objeto del trabajo. Foto. Tony Iglesias)
ANNIEL PORTALES
CASALES
El 19 de septiembre fui invitado a la
peña Letras
compartidas del periodista Reinaldo Cedeño. El 19 de septiembre tuve
la oportunidad de disfrutar de un bellísimo espectáculo y de conocer por
primera vez a la poetisa Teresa Melo.
Recuerdo que durante la sección de
preguntas, dijera la poetisa María Antonia Castro en vos baja y de forma jocosa:
quién escribió El
Mundo de Daniela. Y cierto día me encontré con ese libro pequeño de
tamaño, pero enorme en contenido y leyendo uno de sus poemas: “Jugando con mi
primo” me atrajo la atención más que ninguna otra estas dos estrofas.
Pero yo creo que puedo
jugar como niña o niño:
los juguetes de mi primo
me gustan como los míos.
Si yo juego a las espadas
cruzando brillo con brillo
no me parece que el juego
vaya a cambiarme el vestido.
En ese instante tuve tantos deseos de
darlo a conocer a tanta gente; a mis amigos, a mis compañeros de la escuela y promoción de
salud y leerlo a hombres y mujeres temerosos de que niños y niñas intercambien
en sus juegos, creyendo que van a confundir el estereotipo heterosexual
implantado desde siempre por la humanidad: “los hombres para las mujeres y
viceversa”. Siendo irrespetuosos a la libre orientación sexual.
No fue esa la última vez que lo leí.
Llegaron a mi, numerosas oportunidades de volverlo a releer y hacer volar mis
recuerdos a muchos relatos antes escuchados. Dándose el mismo caso: “no juegues
con muñecas porque eres varón” y “no quiero verte jugando con carritos o
pistolas que eres una niña”. La verdad es que me da mucha pena como limitamos a
nuestros hijos por una estúpida irrealidad creada en la mente.
Creo que si esas personas machistas y
hembristas oyeran este poema podrían sensibilizarse y dejar que niños y niñas disfruten compartir parte de su
tiempo.
El 20 de noviembre de 1989, la Asamblea General
de las Naciones Unidas aprobó por unanimidad la Convención sobre los
Derechos del Niño. En su artículo 31 plantea que los Estados Partes reconocen
el derecho del niño al descanso y el esparcimiento, al juego y a las
actividades recreativas propias de su edad y a participar libremente en la vida
cultural y en las artes.
Desde mi punto de vista el
intercambio entre ambos a través del juego desarrolla la personalidad,
contribuye a desarrollar el espíritu crítico, constructivo, la imaginación,
fantasía y creatividad ofreciéndoles la oportunidad de aprender de ellos
mismos, de otros y del ambiente.
“Jugando con mi primo” me mostró como una talentosa persona y madre asumía
la responsabilidad de preparar a su niña en la comprensión, cooperación, paz,
tolerancia, igualdad de los sexos y amistad entre todas las personas.
ARTÍCULOS
RELACIONADOS
--Ganadores
del I Concurso Caridad Pineda In Memoriam
---Don José
y yo de Noel Pérez, relato ganador del I Concurso Caridad Pineda In Memoriam
como autor novel
---Yo me
quedo con todas esas cosas de Gladys Horruitiner, relato ganador del I Concurso
Caridad Pineda In Memoriam como autor édito
---DEEPAK CHOPRA de Rafael Limia, ganador como mejor relato
sobre la espiritualidad del I Concurso Caridad Pineda In Memoriam
---La noche
y la abuela de Ana Ortega Rodríguez. Mención en el I Concurso Caridad Pineda In
Memoriam
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario